-

30 de marzo de 2012

El Bueno, el Malo y el Feo: Primera temporada de Alcatraz

Bueno señores, la primera temporada de Alcatraz finalmente llegó a su final en medio de un pesimismo colectivo que personalmente no comparto. Hagamos un breve repaso por los aspectos positivos, negativos y desastrosos que pudimos ver en la tan aclamada serie del creador de Lost con una nueva edición de "El Bueno, el Malo y el Feo".

Hace mucho tiempo que deseaba hablar sobre esta serie en particular. Comprendo que hayan opiniones encontradas y discrepantes, con mayor razón cuando la cadena FOX se dedicó a bombardearnos con tanta publicidad antes de su estreno mundial. La verdad es que Alcatraz no es una serie mediocre ni tampoco la octava maravilla del mundo.

El Bueno: Edwin James

Alcatraz ha sido víctima de numerosas críticas que hasta cierto punto me parecen excesivas. Pese a sus capítulos auto conclusivos (mala decisión en mi opinión), estamos hablando de una serie que bien podría agradar al público que gusta del género policial.

El punto más destacado de esta serie ha sido (curiosamente) la notable actuación de sus personajes antagónicos, concretamente estoy hablando del alcaide Warden Edwin James (Jonny Coyne) y su mano derecha Deputy Warden E.B. Tiller (Jason Butler Harner), lo mejorcito en la parrilla de actores que hicieron gala de los perfiles más intrigantes y complejos en toda la temporada (ese toque de sofisticación en medio de una prisión de alta seguridad fue una atinada elección).

En el lado de los protagonistas tenemos al indiscutible Emerson Hauser (Sam Neill) con toda su excelencia para cubrir un personaje frívolo e implacable. Lastimosamente no se puede decir lo mismo de la agente Rebecca Madsen (Sarah Jones) quien no pasa de ser una cara bonita al igual que el agraciado Dr. Diego Soto (Jorge García), a quien prefiero ver mil veces en Lost antes que en Alcatraz.

El Malo: Tommy Madsen

Esta vez no adelantaré spoilers por respeto a quienes aún no se han dado el tiempo de ver detenidamente la serie, pero eso no quiere decir que no hablaré de los puntos más débiles que evidentemente saltan a la vista. Comencemos por la desatinada elección de uno de los personajes claves de Alcatraz, me refiero a Tommy Madsen (David Hoflin) que en ningún momento cubrió mis expectativas o fue capaz de generar esa sensación de intriga que normalmente solemos ver en un personaje enigmático. (sobre todo en los primeros capítulos).

El pecado de Alcatraz fue que se autoproclamase como “la serie”, pretendiendo marcar un precedente en la historia de la televisión como en su momento ocurrió con Lost. Las expectativas sobrevaloraron un proyecto que no escapa del clásico género policial visto en tramas actuales como Fringe o The Mentalist.

El Feo: Falta de Sorpresa

Alcatraz no supo utilizar el factor sorpresa en la mayoría de sus capítulos, incluyendo el cierre de temporada que, excepto por los últimos minutos, no tuvo muchas novedades. El error de Alcatraz fue recurrir a un formato inspirado (posiblemente) en su predecesora (Lost). Los viajes en el tiempo, la prisión ubicada en la “isla” y las preguntas sin respuesta que se develaban en cada episodio parecían más un viejo cuento del que ya habíamos escuchado.

Alcatraz carece de originalidad y capacidad para hacer la diferencia, dos puntos vitales que el mundo competitivo de la televisión no perdona. A pesar de todo, pienso que vale la pena darse una segunda oportunidad y esperar por la siguiente temporada.

Puntaje final: 6/10 - Una serie policial entretenida con una trama llena de acción y un toque de misticismo. Como para pasar un buen rato.

Archivo del blog